"EL SERMON DEL MONTE"

Un día, al ver que la multitud se le acercaba, subió Jesús
con sus discípulos a una colina.
Allí sentado, pronunció el siguiente discurso cargado de
enseñanzas sublimes:
Dichosos los que reconocen humildemente sus necesida-
des espirituales, porque de ellos es el reino de los cielos!
Dichosos los que lloran, porque serán consolados!
Dichosos los mansos, porque el mundo entero les pertenece.
Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia,
porque la obtendrán!
Dichosos los bondadosos, los misericordiosos,
porque obtendrán misericordia.
Dichosos los de limpio corazón, porque verán a Dios.
Dichosos los que luchan por la paz porque serán
llamados hijos de Dios.
Dichosos los que sufren persecución por ser justos,
porque el reino de los cielos les pertenece!
Cuando alguien les ofenda, o persiga, por ser mis
discípulos ,
Maravilloso! Alégrense porque en el cielo les espera
una gran recompensa.
Recuerden que a los profetas antiguos los persiguieron
también.
Ustedes son la sal que hace que el mundo sea tolerable.
Si cual sal pierden el sabor, Que será del mundo?
y saben que se hace con la sal que no sala?
Se echa afuera y se pisotea por inservible!
Mateo 5- 1 al 13

Hace dos mil años, la gente se reunía alrededor
de Jesús a escuchar sus sermones.
Sigue leyendo, Jesús no está muerto!
El té está mirando cómo disfrutas de ellos.

ÁLABALO!
ÉL TE AMA!

"FE SIN DUDAS"

Jesús tuvo hambre, y viendo de lejos a una higuera que
tenía hojas, fue a ver si tal vez hallaba en ella algo;
pero cuando llego a ella, nada halló, sino hojas,
porque no era tiempo de higos.
Entonces Jesús dijo a la higuera:
Nunca jamás coma nadie fruto de ti,
y lo oyeron sus discípulos.
Y pasando por la mañana, vieron que la higuera se
había secado desde las raíces.
Entonces Pedro, acordándose le dijo:
Maestro mira, la higuera que maldijiste se ha secado.
Respondiendo Jesús le dijo:
Tened fe en Dios, porque de cierto os digo que
cualquiera que dijere a este monte;
quítate, y échate en el mar, y no dudare en su corazón,
sino creyere que será hecho lo que dice,
lo que diga será hecho.
Por tanto os digo que todo lo que pidiereis orando,
creed que lo recibiréis, y os vendrá.
Y cuando estés orando, perdonad si tenéis algo contra
alguno para que también vuestro Padre que está en los
cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.

Marcos 11-12 y Marcos 11-20.

ES HERMOSO ALABAR AL SEÑOR!

“La fe pura no tiene dudas,
La duda pura no tiene fe,
Remueve las dudas de tu fe, y entonces…
Dile al monte que se eche al mar.”

Cinco minutos de tu tiempo leyendo la Biblia al día,
no es mucho, pero tu conocimiento de Dios,
sin duda aumentará!

ALABALO! EL TE AMA!

"LA LOTERIA"

Que te parecería ganarte un premio en la lotería de muchos
millones y guardártelos para ti solo sin compartir con nadie
ni un solo centavo?
Me parecería muy mal, creo que sería un pecado!
Si, claro! Así mismo creo yo!
Sin embargo, piensa un poco:
La vida eterna que recibimos cuando aceptamos a Jesucristo
como nuestro Salvador, es mas valiosa que todo el dinero
de la tierra, y negarnos a compartirlo con los demás, es sin
lugar a dudas, un pecado, porque podemos ayudar a otros y
obtener lo que nosotros, gracias a su bondad, ya obtuvimos!
El verdadero amor no es dar a otros un poco de lo nuestro,
materialmente hablando, sino espiritualmente compartir los
dones que Dios nos ha dado para ayudar a nuestro prójimo,
a acercarse a Dios!
Perdóname por ser tan rudo, pero creo que la persona que no
quiere compartir con los demás a Jesucristo…
Es porque no lo tiene!
Porque el Espíritu de Dios que llevamos adentro, se complace
al escucharnos hablarle a la gente acerca de su Hijo!
El verdadero amor no es solamente orar por los demás, sino
enseñarles a amar a Dios para salvar su alma que vale más
que todas las cosas materiales de este mundo!
Y la Salvación, Dios nos la da de gratis, porque su Hijo para
salvarnos, con su sangre, ya todo lo pagó!
Y si estas disfrutando de la alegría que nos trae el haberlo
aceptado en nuestras vidas, nuestro gozo será aún mayor
si con tu ayuda, otros aceptan al Salvador: Cristo Jesús!
Si piensas que todavía no eres salvo…
Lee esto:
“Y si declarares con tus propios labios que Jesucristo es
tu Señor, y creyeres de corazón que Dios lo levantó de
entre los muertos, te salvarás, porque cuando un indivi-
duo cree de corazón, Dios lo da por justo, y cuando
confiesa ante los demás que tiene fe, asegura la salvación.”
Qué esperas? Romanos 10-9.
Pídele a Dios! Salvo serás!

ALÁBALO!

José Salazar
S. de C.

"PRENDE LA LUZ"

“Ustedes son la luz del mundo. Cual ciudad asentada sobre un
monte, brillan en la noche para que todos vean.
No escondan esa luz! Déjenla brillar! Que las obras que realicen,
brillen de tal manera que los hombres alaben al Padre celestial.”
Mateo 5-14.
Un Pastor dando su sermón decía: Jesús quiere que seamos la luz
del mundo mientras regresa!
Que clase de luz te gustaría ser?
Una vela, una lámpara de mano, una antorcha, o tal vez una de
esas novedosas lámparas de un millón de candelas de fuerza?
Todos los feligreses dijeron que les gustaría ser la más poderosa!
Recuerden seguía diciendo el Pastor, que mientras mas grande
mayor es el consumo de energía, y esta energía la obtenemos
leyendo la Biblia!
Si la lámpara es de baterías, y no se usa, la batería comienza a
degenerarse perdiendo la capacidad de mantener su fuerza,
se descargan y eventualmente se mueren.
A mucha gente le gusta leer la Palabra de Dios, pero no les gusta
compartir con otros lo aprendido, dicen que su trabajo les costo
y que es la responsabilidad de cada persona si desean salvarse!
El Espíritu de Dios en nosotros, esta deseoso de compartir con
otros, Las Buenas Nuevas de la salvación de nuestras almas
a través de su Hijo Jesús. El Espíritu de Cristo es nuestro Maestro
cuando nos ponemos a leer su libro Santo.
No necesitamos poseer la más fuerte ni la más sofisticada lámpara
para alumbrarle a la gente su camino y puedan ver la cantidad de
pecado en que se encuentran sumergidos y deseen salirse de el
y comenzar a caminar por los caminos rectos de Dios y encontrar
a aquel que puede transformarles sus vidas.
Vamos! En donde esta tu luz?
Enciéndela! No la escondas!
Déjala brillar!

GLORIA A DIOS!

José Salazar
S. de C.