Amas a Dios?
Claro que sí!
Entonces dime; que es lo que haces para agradarlo?
Oh, no sé! Creo que nada! Porque?
Porque para amar a alguien, hay que hacer algo!
Y no solamente decir; Te amo! Escucha:
Porqué es tan difícil para nosotros ponernos de rodillas para
rezarle un Padre Nuestro a quien todo nos lo da?
Vamos a la iglesia como si estuviéramos haciéndole un
favor y no, no es así!
El no necesita de nosotros, nosotros necesitamos de El!
“El que me obedece dice Jesucristo, es porque me ama!”
Entonces, el amor a Dios es Obediencia!
Y que es lo que Dios nos pide que le obedezcamos?
Que amemos a su Hijo!
El Hijo nos pide que amemos a nuestro prójimo!
Sin embargo amar a la gente no es nada fácil!
Y para poder hacerlo, necesitamos tener al Espíritu
de Dios en nuestros corazones y esto se logra aceptando
a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador!
Escucha:
“Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dadivas
a vuestros hijos, cuanto más, vuestro Padre celestial dará
el Espíritu Santo a los que se lo pidan?” Lucas 11-13.
Amar al prójimo no es solamente decirlo, sino tener viva
en nosotros, la Esperanza de que se salven!
Amar al prójimo es compartir con ellos el amor de Dios!
Amar al prójimo es perdonar, es ayudar a la gente a alcan-
zar las promesas de Dios de llevarnos al cielo a gozar de
una vida eterna junto a Él!
Amar a Dios es amar al prójimo!
Amas a Dios?
GLORIA AL SEÑOR!
José Salazar
S. de C.
